Poema Sísifo-poeta de Luz Méndez De La Vega



A Dina Posada

Acesante
hacia arriba
olvidado del tiempo
arrastrando
pétrea carga de palabras
que me impulsan
hacia el abismo
caigo
en el aterrador
blanco vacío
de la página.

Para volver a empezar
el suplicio
de buscar en la cumbre
el inalcanzable
aire intacto
de lo nunca
antes dicho.

Acezante subo
pero me arrastra
el cargamento
de oscuras palabras
duras y frías
pesadas como piedras.

Ansioso de alas
que no puedo hacer crecer
en mi espalda
me resigno
y regreso
al principio agotador
del primer verso
o de la página vacía.

Sangrante
frustrado en el ascenso
sin lograr vencer
el peso
lastre de siglos
virginidad imposible
retomo mi carga:
tortura eterna
de lo inconcluso.



Poema Qué Alegría Este Tirar de Juan Ramon Jimenez



¡Qué alegría este tirar
de mi freno, cada instante;
este volver a poner
el pie en el lugar cercano,
(casi otro, casi el mismo),
de donde aprisa se iba;
este hacer la seña leve,
segundamente, inmortal!



Poema Hidra 1963 de Leonard Cohen



El pedregoso sendero se enroscaba en torno a mí
atándome a la noche.
Un bote husmeaba el borde del mar
bajo una luz siseante.

Algo suave envolvió una red
y sangró en torno a una lanza
la roma muerte, el chorro de cúmulos –
¡Te hablé a ti, pensé que estabas cerca!

O era acaso la noche tan oscura
que algo murió solo?
Un hombre con la espalda brillante
golpeaba la comida contra una piedra.

* *



Poema La Visita de Jorge Enrique Adoum



(Capítulo de novela)

Llamo a la puerta.
-Quién es, pregunto.
-Yo, contesto.
-Adelante, digo.
Yo entro.
Me veo al que fui hace tiempo.
Me espera el que soy ahora.
No se cuál de los dos está más viejo.

De «Yo me fui con tu nombre por la tierra» 1964



Poema Dora Panchita de Luis Llorens Torres



A doña Panchita el sol
la hizo de carne trigueña.
El sol la hizo buena moza.
El sol la hizo buena hembra.

Le puso negro el cabello;
negras las pupilas negras;
le puso dulces los labios;
le puso dulce la lengua.

Dicen que dicen que doña Panchita
novia es del sol tropical que la besa.
Dicen que dicen que doña Panchita
siente que hierve la sangre en sus venas.

Dicen que dicen que doña Panchita
ha de pecar bajo el sol que la quema.
Dicen que dicen que si ella pecara
culpa seria del sol de su tierra.

Las flores perfuman.
Los pájaros vuelan.
Y doña Panchita
es hija de Eva.



Poema Sin Ti de Marita Troiano



Cuando me quede sin ti
no me crecerán más las uñas
ni el cabello

Sin ti,
congelaré para siempre el firmamento
en un eterno gris
/colores de lamento/
Sin estrellas
Sin luna
Sin un sol
Olvidaré masticar
y decir buenos días
a la gente que más quiero.

Cuando no estés conmigo
ni a mi lado
incendiaré mi balsa,
se secarán mis rios
Se morirá mi verde
Todo me será ajeno
Vulgar,
solo e inútil

Sin ti
no tendré más destino
y perderé mi nombre
y creo que en cuclillas
me quedaré flotando para siempre
en un limbo frío
Sacudida, sin habla
espectando mi enloquecido drama.

Cuando no estés más a mi lado
seré una solitaria sola
y alguien caritativo
me inventará una vida
Pero tendrá que hacérmela creer cada mañana.



Poema Ars de Jose Asuncion Silva



El verso es un beso santo. ¡Poned en él tan sólo,
un pensamiento puro,
en cuyo fondo bullan hirvientes las imágenes
como burbujas de oro de un viejo vino oscuro!

¡Allí verted las flores que en la continua lucha
ajó del mundo el frío,
recuerdos deliciosos de tiempos que no vuelven,
y nardos empapados de gotas de rocío

para que la existencia mísera se embalsame
cual de una esencia ignota
quemándose en el fuego del alma enternecida
de aquel supremo bálsamo basta una sola gota!



Poema No Mires Hacia Atrás… de Antonio Carvajal



No mires hacia atrás: Ya nada queda:
la casa, el sitio, la ciudad, el soto,
escombro, hueco, ripio, humo remoto
o acaso turbia y leve polvareda.

Mira adelante, aunque te retroceda
el ánimo: El futuro no está roto:
si oscuro, intacto; fértil, porque ignoto.
Quiera tu voluntad, tu ánimo pueda.

Pero si te has vendido a las pasadas
sombras; si esclavitud tasó tu prcio
en dos o tres monedas sin sonido,

teme a la libertad, pues no eres recio;
teme a tus fuerzas, pues están gastadas;
teme al futuro, pues será tu olvido.



Poema Soneto Xxxv- Boscán, Las Armas Y El Furor De Marte de Garcilaso De La Vega



Boscán, las armas y el furor de Marte,
que con su propia fuerza el africano
suelo regando, hacen que el romano
imperio reverdezca en esta parte,

han reducido a la memoria el arte
y el antiguo valor italiano,
por cuya fuerza y valerosa mano
África se aterró de parte a parte.

Aquí donde el romano encendimiento,
donde el fuego y la llama lícenciosa
solo el nombre dejaron a Cartago,

vuelve y revuelve amor mi pensamiento,
hiere y enciende el alma temerosa,
y en llanto y en ceniza me deshago.



Poema Visita De Amor de Cristobal De Castillejo



Unas coplas muy cansadas,
con muchos pies arrastrando,
a lo toscado imitadas,
entró un amador cantando,
enojosas y pesadas.
Cada pie con dos corcovas,
y de peso doce arrobas,
trovadas al tiempo viejo.
Dios perdone a Castillejo,
que bien habló de esas trovas.
dijo Amor: ¿Dónde se aprende
ese metro tan prolijo,
que a las orejas ofende?
Algarabía de allende:
el sujeto frío y duro,
y el estilo, tan oscuro
que la dama en quien se emplea
duda, por sabia que sea,
si es requiebro o es conjuro».
«Ved si la invención os basta,
pues Garcilaso y Boscán,
las plumas puestas por asta
cada uno es un Roldán,
y, con todo, no le basta;
yo no alcanzo cuál engaño
te hizo para tu daño,
con locura y desvarío,
meter en mi señorío
moneda de reino extraño.»
«Con dueñas y con doncellas
(dijo Venus), ¿qué pretende
quien las dices sus querellas
en lenguaje que no entiende
él, ni yo, ni vos, ni ellas?
Sentencio al que tal hiciere
que la dama por quien muere
lo tenga por cascabel,
y que haga burla dél
y de cuanto le escribiere».



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